El coco es un alimento delicioso y refrescante. Es una de las frutas a las que más provecho se les saca. Se puede beber el agua, comer la carne ya sea tierna o dura. Prepararlo en dulce y con su corteza se hacen inmurables artículos.
Tiene un sabor agradable, por lo que resulta fácil de incluir en la dieta y además, tiene múltiples beneficios a la salud. A continuación enumeramos algunas de sus propiedades:
- El agua de coco es una bebida isotónica natural que se obtiene de los cocos verdes, cosechados con cinco o seis meses. Es ligera, aporta azúcares y grasas en dosis moderadas, así como minerales y vitaminas.
- El aceite de coco es soluble en agua y penetra sin problemas en la sangre y en el hígado, donde se transforma en energía, en reserva de grasa. Casi no produce obesidad, en comparación a otras grasas.
- Su alto contenido calórico provoca sensación de saciedad.
- Tanto el aceite como la leche sirven de humectantes.
- Útil en el desarrollo infantil, asegura un crecimiento sano de los huesos y dientes.
- Contiene altos niveles de manganeso, potasio y fósforo, los cuales contribuyen al correcto funcionamiento del sistema nervioso y muscular.
- El coco rallado se puede utilizar para aderezar recetas dulces o como exfoliante. Deja la piel muy suave.
- Optimiza el funcionamiento del sistema inmunológico.
- Previene o ayuda a combatir el estreñimiento.
- Es hepatoprotector, antiparasitario, bactericida, antimicótico, inmunoestimulante y antioxidante.
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Coco, un fruto de origen tropical del que se puede obtener aceite de coco, leche y crema de coco, coco rallado o también llamado harina de coco, agua de coco, azúcar de coco, coco deshidratado y, por supuesto, coco fresco, no esperes más y consúmelo, es probable que te encante.