Orgullo debe sentir cualquier deportista que es considerado para representar a su país, pero en la Selección Mexicana de Beisbol no es así últimamente.
Durante la presentación de la nueva franela de la novena tricolor, el presidente de la LMB, Javier Salinas, apuntó que una de las prioridades del proyecto de trabajo entre esta liga y la Federación Mexicana de Beisbol es “devolver el orgullo por jugar en la selección… antes estaba muy manoseada y queremos regresarle profesionalismo, generar ese sentido de pertenencia nuevamente”.
Y esta estrategia, que contempla un plan de trabajo deportivo, comercial y administrativo, ya está dando resultados.
Son varios los peloteros que se comunican con la Federación Mexicana de Beisbol (Femebe) para vestir esos colores. “Desde el pre Panamericano y Juegos Centroamericanos lo sentí, ya hay más deseo de jugar con la selección.
En otros deportes, los atletas se pelean por formar parte de estos representativos. Tiene que ser igual en el beisbol”, agregó Javier Salinas.
El cuadro tricolor estrenará camisolas en marzo; cuando viaje a Tokio para disputar un par de juegos de exhibición ante los nipones (en el Domo de Osaka). Ahí, los directivos mexicanos sostendrán reuniones con la liga local para establecer vínculos. En noviembre, el torneo Premier12, organizado por la WBSC, tendrá a México como una de las sedes de primera ronda.
Este certamen representa la oportunidad de obtener un boleto a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020; los dos mejores representativos, de América y de Asia-Oceanía (sin contar Japón, que clasificó automáticamente) obtendrán el pase olímpico.
En este rubro, México debe superar a Canadá, EEUU, República Dominicana, Venezuela, Cuba y Puerto Rico. El partido por el título de dicho certamen se disputará en la capital nipona, el 17 de noviembre.
(EL UNIVERSAL)