En una carta que circula en redes sociales, la presunta madre del menor de 11 años rescatado en Cozumel, asegura que quiere dar la cara ante las autoridades
Cozumel.- A través de una carta firmada por ella misma, apareció en redes sociales la presunta madre del menor de quien hace unas semanas dimos a conocer, era obligado a cavar su propia tumba por órdenes de su padrastro en la isla de Cozumel.
En la carta de dos hojas que presuntamente fue escrita y firmada por ‘Nubia Cecilia N’ la madre del menor de 11 años, que además ya circula en redes sociales, la mujer explica que el documento tiene la intención de hacer saber a la opinión pública, y a su hijo, que se encuentra sumamente preocupada por él.
Señala que recientemente fue madre por segunda ocasión y ” Estoy aprendiendo a hacer las cosas lo mejor posible y aunque en el camino pueden surgir dificultades estoy dispuesta a aprender a ser la madre que merecen mis hijos”.
Aseguró que ella y su pareja viven con miedo, pues después de los hechos donde encontraron al menor cavando su tumba ha recibido muchos insultos y amenazas de muerte por redes sociales a través de mensajes; destacó que incluso personas se han metido a su casa a realizar actos vandálicos.
Finalmente, asegurando que tiene varios días sin ver a su hijo hizo un llamado a las autoridades de seguridad pública y pidió que no lo dejen solos; pues asegura que ella y su esposo tienen toda la intención de acudir ante las autoridades para aclarar los hechos que se les atribuyen.
Los hechos
El pasado 14 de agosto, un menor de 11 años fue rescatado por elementos de la policía Quintana Roo, que estaba desnudo y cavando un hueco en el monte, señalando que su padrastro lo había estado maltratando física y mentalmente.

Indicó que fue el padrastro quien lo mandó al monte para hacer un hueco pues su padrastro le dijo que “ya no lo necesitaba y sólo estorbaba para hacer una vida con su mamá” y que ahí sería sepultado una vez que lo matarán.
Se supo que la pareja, que ya fue identificada por las autoridades Nubia V. y el padrastro Alfonso G. presuntamente originario de Yucatán, están prófugos, junto con el bebé recién nacido.
El caso que se maneja de manera muy hermética para proteger la identidad del menor, y hasta ahora no se ha dado más información sobre el caso.
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