Este domingo, el Malecón del puerto de Progreso presentó un “lleno excepcional” desde la apertura de las playas. ¡Había gente con y sin cubrebocas!
El malecón del puerto de Progreso registró hoy un lleno excepcional; lo que fue calificado por meseros de los restaurantes como la mejor afluencia de visitantes desde la reactivación económica de Yucatán.
Las cabañas de palma instaladas a las orillas de la playa del malecón progreseño estuvieron llenas; gente consumió y bebió hasta donde lo permitió el bolsillo.
El clima soleado, la brisa fresca y el ambiente de entretenimiento, la música alegre de los restaurantes y el deseo familiar de romper la monotonía cotidiana del confinamiento y medidas sanitarias, generó un ambiente de libertad en la playa donde se vio gente con y sin cubrebocas.
Jornada excepcional
Un coordinador del restaurante Crabster, quien no dio su nombre porque no está autorizado para proporcionar información del establecimiento, resumió la jornada dominical: es excepcional, el mejor día desde la reactivación.
Y solo bastó ver al reportero que el área principal del negocio frente a la playa estaba casi lleno y las palapas a su cargo también tuvieron la mejor afluencia.
Casi todos los restaurantes frente a la playa registraron una ocupación extraordinaria.
La mayor afluencia se concentró en la playa donde también estuvieron parvadas de gaviotas cazando desperdicios de comida que cayó de los visitantes.
Pocos se interesaron en las artesanías por lo que estos negocios no tuvieron sus mejores ventas, según se observó durante los recorridos en el malecón.
La calle 21, que es paralela al malecón, fue insuficiente para albergar a los cientos de vehículos que llegaron al puerto en esta nueva realidad de la pandemia.
En los hechos es una normalidad casi similar antes de la pandemia del coronavirus covid-19 porque es imposible respetar la sana distancia, lavarse las manos y usar cubrebocas en el mar, aunque sí hubo personas que usaron el articulo de protección.
Jornada tranquila
La policía municipal del puerto recorrió el malecón junto con la Policía Estatal y reportó una jornada tranquila. Solo hubo una intervención en el malecón porque una mujer de edad avanzada tuvo una baja presión que atendieron paramédicos de la corporación.
Todo fue alegría hoy en la playa, hasta doña Hilda, una vendedora de paquetes de juguetes de playa, informó que a las 2 de la tarde llevaba más de 500 pesos de ventas.
Tres guanajuatenses que trabajan en una compañía nacional y que construyen una obra, también llegaron al puerto.
Alberto Sánchez, quien platicó con el reportero cuando salió del agua dijo que les encantó Mérida y Progreso y afirmó que el mejor recuerdo que se llevará es la seguridad.
Ellos pudieron salir a cualquier hora del día o noche y no tuvieron problemas de delincuencia.
La buena afluencia se mantuvo hasta la partida del reportero a las 5 de la tarde.
Con información de Joaquín Chan, MegaNews