“Hace cuatro años me despojaron de mis hijas, me despojaron y he luchado por todo este tiempo para recuperarlas”, expresó Dariana Quintal Narváez, durante la protesta que realizó ayer con un grupo de personas frente al Palacio de Gobierno.
Representante del movimiento “Yucatán… No más negocios con nuestros hijos”, Dariana acusó de corrupción a autoridades del Centro de Convivencia Familiar de Yucatán (Cecofay) y la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia (Promedefa).
De manera directa acusó a Rocío del Socorro Euán Medina, coordinadora del Cecofay, y a la titular y extitular de la Promedefa, Irene Noemí Torres Ortegón y Cinthia Guliana Pacheco Garrido, respectivamente.
Tras señalar que ya presentó denuncias en la Fiscalía General, la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán y la Vicefiscalía Anticorrupción del Estado, dijo que el gobernador Rolando Zapata Bello jamás las ha escuchado ni se ha pronunciado al respecto.
“Nunca ha tomado cartas en el asunto y yo creo que ni siquiera le interesa el tema. Al señor Rolando Zapata lo que menos le ha interesado es la violencia contra mujeres y niños, lo que menos la ha interesado es la violencia contra las familias en Yucatán”, exclamó.
Luego recordó que su situación comenzó hace más de cuatro años cuando su exesposo Ángel Ismael Barragán Pérez y su abogado le fabricaron delitos (violencia intrafamiliar e intento de homicidio contra una de sus hijas) para quitarle a sus hijas.
“Me separan de mi hija, me inventan delitos. Fui encarcelada y cuando salgo (de la cárcel) me enteró que estoy en litigio, y en este ínter me ordenan visitas supervisadas (para ver a sus hijas) y es donde empiezo a darme cuenta de todo lo que está pasando en el Caimede”.
Te puede interesar: Despiden al periodista Javier Valladares, ejecutado en Cancún
Dariana Quintal relató que se dio cuenta de cómo muchas mujeres fueron despojadas de sus hijos tras inventarles delitos. “He podido detectar que a familias de zonas marginadas también las despojan de sus hijos. Bajo engaños y supuestas denuncias de violencia son llamadas por la Promedefa para que presenten a sus niños, y una vez allí son despojadas y los niños enviados al Caimede”.
Al investigar más, relató, se dio cuenta de las violaciones a los derechos humanos y a los derechos del menor, “pues no existe una violencia demostrada, solo especulaciones o por una llamada anónima van y le quitan a sus niños”.
También dijo que descubrió las malas actuaciones de las coordinadora del Cefocay, quien altera documentos que luego son enviadas a los jueces y favorece al mejor postor. Afirmó que puede comprobar los actos de corrupción que señala pues incluso a ella le pidieron un vehículo. Señaló que al descubrir la situación ha sido víctima de acoso. Pero lo peor es lo que está pasando su hija de nueve años. “A mi hija la hicieron paciente psiquiátrica de siete años cuando era una niña normal, una niña sana. Ahora no hay quien la cuide, quien la vigile, me reprueba todas sus materias”.
La manifestante pidió al gobernador electo Mauricio Vila Dosal que haga una revisión de lo que sucede en la Promedefa que, resaltó, “es un nido de corrupción”.
Agencia Megamedia (IVÁN CANUL)